jueves, 5 de agosto de 2010

20100805 Víspera de algo. El qué: a determinar...

Tiempo hace que no escribo y es porque no tengo necesidad de ello, no porque no me hayan sucedido cosas en la vida que no mereciera la pena plasmar. Ahora bien, lo de compartirlas eso ya es harina de otro costal. Egoismo (algo así he oído en referencia a mi persona hace no muchos días) por querer los momentos para mi, gastarlos antes de exponerlos.

Ahora parece, y digo bien: parece, que se acerca el periodo vacacional. Lo de la vida privada parece ser que es incompatible con la vida en una empres de "tecnología punta", dicho sea esto con todo el retintín del que soy capaz.

Ahora toca una etapa de vacaciones en los Madriles: entreno (el que pueda, que por lo que parece va a ser poco), fotos, familia... Lo mismo no en ese orden, pero que no falte ninguno de los ingredientes. De momento mañana me iré a casa de mi hermana a ver a María II, la chiquita. Aver cómo me recibe a eso de las 7.30 de la mañana... y de paso la castigo un café a mi hermana antes de entrar a trabajar. Así que en eso estamos: muchas posibilidades y nada claro. De momento éste fin de semana pasado me he pegado un hartón a familia en las fiestas de San Martín. Solo se eché de menos a Nati, José y sus tres fieras: Dani, Alberto y Óscar. Otra vez será... y en esas estamos.

De momento voy a dejar esto de los ordenadores durante la época vacional. No quiere decir que no escriba en el blog, que no escribo de forma habitual. Lo que quiere decir es que no voy a plantearme la posibilidad de escibir en el blog porque voy a estar de vacaciones.

Una cosa está clara: a la vuelta de las vacaciones... Orduña.

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